viernes, 8 de febrero de 2013

Mañana... quizás no exista la que hoy conoces

No quiero admitirlo, pero estoy asustada, bastante en realidad. Te dije que no me tenías, te lo demostré, y aún sigo sin creerlo. Mañana, mañana... mañana cuando te vea, mi corazón volverá a detenerse, mis ojos volverán a arder para detener las lágrimas, mis labios volverán a suspirar, y mi cuerpo entero te buscará. Quizás, mañana no sea tan fuerte como hasta ahora, quizás, mañana me tengas a tus pies. Pero hoy, que aún mi mente está despejada, que aún su recuerdo inunda mis sueños, hoy te digo que no te amo, a pesar de las palabras que mañana me puedas oír decir. Sé que no es justo, no es justo para él, y quizás por eso lo perdí, pero tampoco es justo para mí, y sé que por eso me perdí. Quisiera decirte todo esto, y más, quisiera decirlo frente a tus ojos, frente a tus labios, frente a tus manos, pero no puedo, me tiembla el cuerpo, me estallan los oídos, y mis labios se cosen, solo pronunciando: Te amo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario